La primera noche ellos se acercan y cogen una flor de nuestro jardín,
y no decimos nada...
La segunda noche, ya no se esconden y pisan las flores,
matan nuestro perro y no decimos nada...
Hasta que un día el más frágil de ellos
entra sólo en nuestra casa,
nos roba la luna, y conociendo nuestro miedo
nos arranca la voz de la garganta.
Y porque no dijimos nada
...ya no podemos decir nada
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2 comentarios:
con palabras
con solo palabras
solamente palabras
nada mas que palabras
algun hecho
algun que otro hecho
y ellos siguen haciendo desaparecer nuestras flores
nuestras lunas
nuestras gargantas
asi que un dia
necesitamos para sentirnos
algo
pisar sus flores
arrancar sus lunas
cortar sus gargantas
y en ese juego dialectico
tal vez
Siempre es un gran placer recordar sus maravillosas clases profesor Jesús, la verdad es increíble poder reconocer ciertas tendencias estudiadas, el arte apasiona y mucho y personalmente me enamoré del arte!
Gracias por sus valiosas Clases!!
Cariños, Andrea.
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